Entrevista con el vampiro (1994)

"Dios mata indiscriminadamente, y nosotros también. Porque ninguna criatura de Dios es como nosotros, ninguna se parece tanto a él como nosotros..."

Los vampiros ... criaturas de la noche, chupadores de sangre en pro de la vida eterna, un mito tan universal como enigmático. Aparecen en casi todas las culturas, india, norteamericana, centroamericana y por supuesto Europea, casi dioses de la belleza y el terror ... ¿qué tienen para que se hablen una y otra vez de ellos, para que se versionen historias en todas las épocas y en todas las artes?

Está claro que no son unos seres más de terror, son un referente ... desde Nosferatu, una alimaña habida de sangre, pasando por snobs y quiceañeros hasta llegar a los más actuales de "Déjame entrar".

Pues bien, dentro del cine de vampiros, nos encontramos con la obra culmen, el máximo exponente de la elegancia y es gracias a la suma de múltiples aspectos:
  • El guión, adaptado de las novelas de Anne Rice, "Crónicas vampíricas". Solo he leído "Lestat el vampiro", pero puedo afirmar la capacidad que tiene el texto de hacernos empatizar con el vampiro. Esta habilidad se traslada a la pantalla de una manera excepcional mediante el recurso del contador de historias.
  • Los actores, una pareja de guapitos que alcanzan cotas inimaginables, el caso de Tom Cruise soprende sobremanera, consigue una interpretación impecable de Lestat, embriagadora y llena de sutilezas. Realmente se convierte en el motor de la cinta, en la segunda parte del metraje, ya sin él, la película decae ya que Antonio Banderas no consigue recoger el testigo con la misma solvencia. Brad Pitt se muestra más sosito aunque es un buen contrapeso a la energía de Cruise, y no podemos olvidarnos a la pequeña Kirsten Dunst que tira de Pitt y muestra una madurez en la pantalla impropia de una debutante.
  • La música, más abajo dejo la banda sonora original, excepcional de Eliot Goldenthal, perfentamente utilizada por Jordan (tendrá su propio apartado). Me encanta el comienzo con ese traveling etrerno acercándonos a San Francisco. BSO nominada al Oscar.
  • La fotografía, indispensable y perfecta, una eterna noche plasmada por Philippe Rousselot, experimentado director de fotografía que recientemente nos ha deleitado con la saga Sherlock Holmes.
  • El diseño de producción, una dirección artística nomimada al Oscar que nos introduce en Nueva Orleans, colonial y actual, cosmopolita y marinera ... y sobre todo, húmeda y tórrida.
  • Y dejo para el final a la piedra angular de la producción, el director, la elegancia hecha celuloide, me recuerda a veces a Jane Campion. El irlandés Neil Jordan logró su mejor trabajo hasta la fecha, consiguió ejecutar a la perfección el trabajo de director, sacar el máximo rendimiento a todas las partes logrando una sinergia propia de artistas en estado de gracia.
No se si he conseguido trasladar al blog las bondades de esta obra de arte, sin tocar ni un ápice de la historia ... la fascinación de los humanos por la inmortalidad a cualquier precio y sobre todo, el tema fundamental de la cinta es LA SOLEDAD. Soledad en la que están sumergidos todos los personajes, desde Louis con la muerte de todos sus seres queridos, Lestat con la interminable búsqueda de su compañero, la pequeña y huérfana Claudia, hasta llegar al fascinado periodista interpretado por Slater. 

¿Hay algo peor que estar solo? ... si, estarlo para toda la eternidad.

No puedo olvidarme de la presentación de Lestat, ... Louis buscando a un verdugo desesperadamente que le libre de la agonía que sufre, haciendo trampas en los suburbios de Nueva Orleans, es en este momento cuando Lestat aparece de espaldas en un segundo piso observando la escena, como una rapaz al acecho de su presa, todo rodado con una suavidad totalmente contraria a lo que se muestra.

Destacar la imagen de una Europa desgastada, endogamigamente destruida por su propia existencia.

Termino con una de las frases que más me gusta de la peli:

"Piadosa muerte, te encanta sentirte culpable..."


PUNTUACIÓN: 8,5

Juanma

Armand


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